Las ventanas y puertas K·LINE se diseñan, desarrollan y fabrican en Europa controlando toda la cadena de suministro. Los procesos automatizados y los controles de calidad garantizan que cada ventana cumpla realmente con las prestaciones técnicas descritas (eficiencia energética, hermeticidad, reducción de ruido, etc).
Las ventanas y puertas K·LINE instalados de acuerdo con las mejores prácticas profesionales, el código de edificación vigente y las instrucciones de instalación y montaje, están garantizados contra cualquier defecto de fabricación o montaje que los haga inadecuados para el uso previsto. Esta garantía sólo es posible gracias a un control exhaustivo de toda la cadena, desde los materiales, los procesos de producción y la instalación en obra.
Gracias al sistema de fabricación industrial y al control de la cadena de suministro, es posible predecir los plazos de entrega, incluso con cargas de trabajo variables. K·LINE puede producir hasta 2.500 ventanas al día. Además, con su propia logística, puede realizar entregas en cualquier punto del país de forma puntual y fiable.
Todas las ventanas y puertas fabricadas por K·LINE incorporan una etiqueta de garantía que identifica la trazabilidad del producto, con un número de referencia y un código QR diferente para cada unidad de venta. A través de ellos, es posible conocer de forma sencilla todo el ciclo de fabricación e instalación: cuándo y cómo se fabricó, sus dimensiones, qué vidrios y accesorios contiene, el peso del vidrio, las referencias de color, el marcado CE del producto (aislamiento térmico y acústico, transmisión luminosa, factor solar y clasificación AEV de aire, agua y viento), quién lo instaló y cuándo.
Las puertas y ventanas llegan a la obra perfectamente embaladas y son instaladas por profesionales formados por la empresa. Cualquier deficiencia en el producto o en la instalación que no pueda ser resuelta por el distribuidor profesional, será supervisada por el departamento de control de calidad de la fábrica.
Las ventanas K·LINE poseen el mayor número de certificaciones y sellos de calidad, garantía de fiabilidad y seguridad tanto para profesionales como para los usuarios. Además de ser conformes a la reglamentación del nuevo Código Técnico de la Edificación CTE, cuentan con los certificados ACOTHERM y marcas NF-CSTBat Ventana RPT (según modelos), disponiendo igualmente de los mejores sellos de calidad: Marcado CE, Applus, CLASIFICACIÓN A.E.V. (Agua, Aire, Viento), Cekal, Ewaa Euras, Qualimarine, Eficiencia Energética, Emisiones de Aire Interior.
Estar siempre informado de la seguridad de tu vivienda y comprobar que las ventanas, las balconeras y la puerta de entrada están perfectamente bloqueadas y no cerradas sin más: ¡todo esto ahora es posible gracias al Detector de Bloqueo Integrado (DVI) de K·LINE! En efecto, este sensor por radio invisible permite que tus ventanas te informen de su estado (bloqueadas o no) en tiempo real, directamente en tu smartphone o tableta. Una maravilla de la tecnología al alcance de todos y esencial para tu seguridad y bienestar.
Con K·LINE, tienes información directa de tu casa, proporcionándote la comodidad de un hogar conectado, gracias a la aplicación K•LINE Smart Home.
En K·LINE hemos desarrollado nuestra propia solución dedicada a la vida conectada: K·LINE Smart Home. Los detectores de bloqueo integrados, junto con una aplicación gratuita, te permiten estar constantemente informado sobre el estado de seguridad de tu casa.
K·LINE Smart Home es compatible con Google Home y Amazon Alexa. Cualquier altavoz conectado y equipado con el asistente de Google o Amazon te permite controlar tu hogar por voz. Una vez instalado el altavoz conectado, puede descargar la aplicación móvil para su asistente de voz. Podrás controlar tu equipo por voz, desde tu smartphone, incluso cuando no estés cerca de tu altavoz.
Gracias a la técnica de hoja oculta y a la esbeltez de sus perfiles, las ventanas K·LINE ofrecen una superficie acristalada un 15% mayor que una ventana tradicional. Esto se traduce en una mayor transparencia y luminosidad interior y confiere a las ventanas K·LINE un aspecto más elegante.
Gracias a un concepto de producto único que combina lo mejor de la tecnología de aislamiento (rotura total de puente térmico, doble o triple acristalamiento con aislamiento térmico reforzado, relleno de argón e intercalarios no metálicos), las ventanas y correderas K·LINE cumplen perfectamente los requisitos de ahorro energético, tanto en obra nueva como en rehabilitación.
La normativa acústica para edificios nuevos en España estipula un aislamiento mínimo de la fachada de 30dB (para uso residencial) a 45dB para entornos extremos (circunvalaciones, ferrocarriles, aeropuertos...).
Las ventanas y puertas correderas K·LINE están equipadas de serie con un acristalamiento que les permite alcanzar un nivel de confort acústico de 30dB. Y para exigencias más estrictas, nuestras ventanas equipadas con acristalamiento acústico logran un aislamiento de la fachada de 41 dB, y nuestras ventanas correderas de 35 dB. Para entornos extremos, la ventana K·LINE A.I.R proporciona hasta 44 dB de aislamiento de fachada: ¡sin duda, uno de los mejores aislamientos acústicos del mercado!
Gracias a su propio departamento de I+D, K·LINE fue la primera empresa en diseñar y producir una ventana de hoja oculta. Gracias a la innovación constante es posible adaptarse a los requisitos cada vez más exigentes del mercado. Un ejemplo de innovación es el próximo lanzamiento de un herraje que permite tener una ventana con bisagras ocultas con de apertura de 180°.
Gracias a su alto aislamiento térmico, las ventanas K·LINE permiten realizar importantes ahorros energéticos y beneficiarse de ayudas económicas (beneficios fiscales, Eco-PTZ).
K·LINE es el líder europeo en diseño y fabricación a medida de ventanas y puertas de aluminio a punto de instalar para arquitectura y construcción sostenible, con venta exclusiva en distribuidores profesionales autorizados, filial para España y Portugal de la sociedad francesa K·LINE con sede en Les Herbiers.
Dispone de un total de 6 plantas de fabricación ultramodernas con 150.000 m2 de superficie cubierta, ubicadas en España (1 factoría) y Francia (5 factorías), con una plantilla de 2.300 empleados y una facturación en 2021 de 445 millones de euros, y una capacidad de producción de 2.500 carpinterías a medida diarias, acabadas a punto de instalar.
La empresa es propiedad del Grupo Liébot, uno de los referentes europeos en la fabricación de fachadas y ventanas, con una facturación de 700 millones de euros en 2022 y una plantilla de 3.850 empleados. K·LINE dispone de una planta propia de extrusión de perfiles de aluminio en Francia, desde la que abastece las factorías del grupo.
Las ventanas y puertas K·LINE resultan ideales para el sector de la construcción industrializada, dado que se entregan totalmente acabadas y equipadas, a punto de instalar, por lo que su ensamblaje en los módulos preconstruidos resulta sumamente sencillo, aportando una máxima eficiencia energética a la construcción, con unos niveles de aislamiento térmico de hasta Uw 0,84 W/m2.k y acústico de 30 a 44 dB, estando especialmente recomendadas en viviendas preconstruidas, pasivas, bio-pasivas o Passive-house. Sin lugar a duda, son la solución perfecta para los cerramientos de las construcciones industrializadas, con trato directo de industrial a industrial, sin intermediarios.